¿A qué le temes? Cuando estamos en un proceso de creación de marca personal y empezamos a trabajar nuestro perfect pitch, muchas veces no queremos compartirlo con otros, porque nos imaginamos escenarios en los que quizá no salgamos bien librados.
Pensar en el qué dirán, en si saldrá bien o no, en que quizá no sientes que tengas la suficiente autoridad y el conocimiento para emprender o hablar de determinado tema… es quizá porque estás tan enfocad@ en tus capacidades, tus talentos, tus habilidades, que has perdido de vista tu misión y que no se trata de ti. Presentar un discurso perfecto o perfect pitch es simplemente compartir tu mensaje y lo que haces poniendo como foco la otra persona. Así que, te animo a crear tu perfect pitch, probarlo y ajustarlo, intentarlo de nuevo y si es necesario volver a ajustar.
Pero recuerda siempre, que no se trata de ti, si no de lo que puedes hacer por los demás. En este vídeo te compartiré una clave infalible para ajustar tu mensaje y cautivar a tu interlocutor. Reconozco que cometí algunos errores con mi discurso, pero luego de probar y saber de qué se trataba todo esto del perfect pitch [discurso perfecto], he tenido un antes y un después en mis reuniones de negocios, eventos de networking y en general en la construcción de mi marca personal.